Consejos Financieros desde la
Palabra del Señor

[ PalabrasVivas sobre Finanzas ]

PREGUNTA: ¿Dónde estoy enfocado?

Si he puesto mi confianza en el oro…si me regocijo en mi gran riqueza, en la fortuna que han ganado mis manos, entonces éstos serán los pecados por los que seré juzgado, porque habré sido infiel a Dios en lo alto. (Job 31, 24.25.28)

Podrías decirte a ti mismo: “Mi poder y la fuerza de mis manos han producido esta riqueza para mí.” Pero recuerda al Señor tu Dios, porque es Él quien te da la habilidad para producir riquezas. (Deuteronomio 8, 17.18)

No me des pobreza ni riqueza, sino dame sólo mi pan diario. No sea que llegue a hartarme y reniegue, y diga: «¿Quién es el Señor? O no sea que, siendo pobre, me dé al robo, e injurie el nombre de mi Dios. (Proverbios 30, 8-9)

Aunque tus riquezas aumenten, no pongas tu corazón en ellas. (Salmo 62, 11)

Quien confíe en las riquezas caerá, pero los justos prosperarán como brotes nuevos de una rama. (Proverbios 11:28)

Las personas que quieren enriquecerse caen en tentaciones, trampas y en muchas cosas dañinas que hunden a los hombres en la ruina y la perdición. Porque el amor al dinero es la raíz de todos los males. Algunas personas, ávidas de dinero, se extraviaron de la fe y fueron traspasados por muchos dolores. (1 Timoteo 6, 9.10)

No se puede servir a Dios y a las riquezas. (Mateo 6, 24)

¡Cuidado! Estén atentos contra todo tipo de avaricia; la vida del hombre no consiste en la abundancia de sus bienes. (Lucas 12, 15)

El que recibió la semilla que cayó entre espinos es el hombre que oye la Palabra, pero las preocupaciones de la vida y el engaño de las riquezas la ahogan y no germina. (Mateo 13, 22)

PREGUNTA: ¿Qué exige Dios de nosotros para que podamos recibir su abundancia?

El Señor tu Dios hará prosperar toda la obra de tus manos… si obedeces al Señor tu Dios y guardas sus mandamientos y sus preceptos… y si te vuelves al Señor tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma. (Deuteronomio 30, 9-10)

Bienaventurado el hombre que teme al Señor, que halla gran deleite en sus mandamientos. Bienes y riquezas hay en su casa, y su justicia permanece para siempre. (Salmo 112, 1,3)

La humildad y el temor del Señor atraen la riqueza. (Proverbios 22,4)

Que a nadie le deban nada. (Romanos 13, 8)

Las manos ociosas conducen a la pobreza, pero las manos de los trabajadores enriquecen. (Proverbios 10, 4)

Si prestas dinero a los necesitados no le cobrarás ningún interés. (Éxodo 22, 25)

No se debe prestar dinero a interés o alimentos a usura. (Levítico 25, 37)

Puedes exigir el pago de un extranjero, pero se debe cancelar cualquier deuda que tu hermano tenga contigo. (Deuteronomio 15, 3)

No extorsiones a nadie y conténtate con tu salario. (Lucas 3, 14)

Que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto. (1 Timoteo 6, 8)

Manténganse libres del amor al dinero, contentos con lo que tienen, porque Dios ha dicho: «Nunca te dejaré; nunca te abandonaré «(Hebreos 13, 5).

Honra a Yahvé con tus bienes, entonces tus graneros se llenarán a reventar. (Proverbios 3, 9.10)

El primer día de cada semana, aparta una suma de dinero de acuerdo a tus ingresos. (1 Corintios 16, 2)

En el lugar que el Señor tu Dios escoja para poner allí su nombre – le ofrecerán todo lo que yo les mando: … sus diezmos y regalos especiales y todo lo más selecto que han prometido al Señor. (Deuteronomio 12, 11)

¿Robará el hombre a Dios? Sin embargo ustedes me han robado. Y todavía preguntan: «¿Cómo te hemos robado?» En los diezmos y ofrendas. Ustedes están bajo una maldición … porque me han robado. (Malaquías 3, 8-9)

«Traigan todos los diezmos al tesoro del templo… y pruébenme ahora en esto,» dice el Señor Todopoderoso, “y vean si no abro las compuertas del cielo y derramo sobre ustedes bendiciones hasta que no haya más espacio suficiente.»(Malaquías 3, 10)

El hombre que da gratis gana aún más…Un hombre generoso prosperará. (Proverbios 11, 24.25)

Quien siembra generosamente también cosechará generosamente. Cada uno debe dar lo que ha decidido, no de mala gana, porque Dios ama al que da con alegría. (2 Corintios 9, 6.7)

PREGUNTA: ¿Promete Dios ser generoso contigo?

El Señor te garantiza abundante prosperidad… El Señor abrirá los cielos, los depósitos de Su abundancia… para bendecir todo el trabajo de tus manos. (Deuteronomio 28, 9.11.12)

“Porque yo conozco los planes que tengo para ti” dice el Señor, “planes para prosperarte y no para dañarte, planes para darte esperanza y un futuro.” (Jeremías 29, 11)

No te preocupes por tu vida, qué comerás o beberás; tampoco qué usarás en tu cuerpo… Mira los pájaros del aire… tu Padre celestial los alimenta. ¿No eres tú mucho más valioso que ellos? (Mateo 6, 25.26)

Dios satisfará todas tus necesidades según Sus riquezas gloriosas en Cristo Jesús. (Filipenses 4, 19)

Serás enriquecido de muchas formas para que puedas ser generoso en cada ocasión. (2 Corintios 9, 11)

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